De todas maneras el CIMAS continuará monitoreando la zona por si el cetáceo hubiera sido trasladado por la marea hacia otro sector.
La noticia del varamiento había llegado pasada las 15 horas de ayer donde de inmediato se arbitraron los medios para asistirla hasta que suba la marea, ya que se encontraba a unos 300 metros de la marea.
Se trataba de una ballena franca austral hembra de unos 13 metros de largo aproximadamente. Su cría se encontraba esperándola en el mar.
Entrada la noche personal de prefectura y biólogos de la zona montaron una guardia por si el animal no podía salir.
En horas de la madrugada dieron aviso que la ballena ya no se encontraba en lo lugar lo que hizo presumir que habría salido por sus propios medios.