El plástico que se recolecte será enviado a Plottier, a la empresa Dangen, donde se transformarán en bancos para la plaza barrial. En cuanto a las tapitas, serán separadas para sumarse a la campaña nacional de la Fundación Garrahan.
Para la construcción del punto limpio se reutilizaron dos canastos de maxibidones, a los que se les colocó una tapa con un orificio para permitir el ingreso de botellas limpias y aplastadas; en tanto para las tapitas se utilizaron bidones de agua en desuso, adosados a los canastos.
Este proyecto es una prueba piloto que está inserto en el Programa Nacional Mejor Hábitat que se está desarrollando en el Loteo social I; se trata, además, de un trabajo en conjunto entre Nación, Provincia y Municipio.