Río Negro adhiere al Día Mundial de la Alimentación

Con el objetivo de concientizar sobre la problemática, desde la cartera sanitaria se recuerda que para hacer frente a la malnutrición son precisas medidas integradas e intervenciones complementarias en la disposición de los recursos naturales, en la sanidad pública y la educación, pero además, no escapa a la responsabilidad de cada persona de aprovechar todos los recursos disponibles y de esta manera reducir la “Huella Alimentaria”. 

La primera recomendación es “comer alimentos variados”, esta sencilla consigna constituye uno de los principios claves para velar por la calidad de la alimentación.

La cantidad de comida también es importante, la energía proporcionada debe ser suficiente, pero no  excesiva; se debe equilibrar según el nivel de actividad. 

Una alimentación variada, compuesta por cantidades y combinaciones equilibradas de frutas, hortalizas frescas, cereales, grasas y aceites, legumbres, como así también de azúcares, lácteos y alimentos de origen animal, proporcionará la gama completa de nutrientes que necesita la mayoría de las personas para llevar una vida sana y activa.

Todos pueden hacer algo para mejorar su alimentación; se puede ayudar a otros a alimentarse mejor y de este modo proteger la salud; todos pueden saber y enseñar a elegir y combinar los alimentos adecuadamente; para aprovechar mejor su presupuesto.  

 

Consejos para reducir los desechos y ahorrar dinero

 

-Se recomienda pensar el menú de la semana y hacer una lista antes de ir de compras, para ahorrar tiempo y dinero. 

-Planear las comidas teniendo en cuenta las fechas de vencimiento, ayuda a ahorrar dinero.  

-Mantener  la  heladera a una temperatura entre 1-5º C, ayuda a obtener la mejor calidad de los alimentos  y es importante guardar los alimentos teniendo en cuenta las instrucciones del envase. 

-Utilizar  los restos de carnes, de verduras, frutas, quesos y salsas para elaborar otras comidas, impide desperdiciar alimentos. 

-Utilizar los desechos para hacer compost para el jardín, desde verduras sin cocinar, cáscaras de frutas, restos de café, yerba, té, cáscaras de huevo, hasta  pequeñas cantidades de papel; pueden usarse para hacer compost en casa, reduciendo la cantidad de basura y creando fertilizantes nutritivos y gratis.

La finalidad es concientizar a la población rionegrina sobre el problema alimentario y fortalecer la solidaridad en la lucha contra el hambre, la desnutrición y la pobreza.

Aproximadamente  2.000.000.000 de personas  en el mundo carecen  de vitaminas y minerales esenciales para gozar de buena salud;  1.400.000.000 tienen sobrepeso y un tercio son obesas, corriendo el riesgo de sufrir cardiopatías coronarias, diabetes u otros problemas de salud. Los rionegrinos no escapan a esta realidad de malnutrición; por eso es necesario tomar conciencia sobre la educación alimentaria nutricional.